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Esta casa
benedictina fue fundada y dotada con bienes y tierras
por Roger de Limoges en el año 785 con la complicidad
del rey franco Carlomagno. Fue uno de los monasterios
que se vio más beneficiado por la monarquía durante los
años siguientes, al tiempo que fue acumulando un
importante tesoro en forma de reliquias, muchas de ellas
aportadas por los propios reyes que convirtieron el
lugar en un centro de devoción y que promovió la llegada
de peregrinos lo que a su vez favorecía su situación
económica. Según la leyenda, una de las reliquias que
gozaban más veneración era conocida como Saint-Voeu,
considerado el "santo prepucio" entregado por un ángel a
Carlomagno, otras versiones dicen que éste lo entregó al
papa y se conservaría en Roma. También se guardaba un
fragmento de la Vera Cruz, entre muchas otras.
Carlomagno también confirmó las donaciones de Roger de
Limoges y declaró esta casa exenta de la autoridad
episcopal. El papa León III también lo confirmó en el
año 801, poniendo la abadía bajo su autoridad. |
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Ludovico Pío (en 815), Lotario (830) y Carlos el Calvo (872 y 874) y
algunos papas también intervinieron a favor de esta casa. Durante el
siglo X el lugar cayó víctima de dos incendios y como consecuencia
del segundo, entre el 1017 y 1028 se levantó una nueva iglesia. De
ha considerado que monjes fugutivos de esta abadía, refugiados en
Auvernia, restaurarona la abadía de
Saint-Austremoine de Issoire. El
papa Urbano II visitó esta abadía en 1096 y emitió una bula donde
confirmaba todas las posesiones de Charroux. Durante el siglo XII
continuaron las donaciones y bulas a favor de la casa, actos que
tuvieron continuidad en los siglos siguientes, con el paréntesis de
la guerra de los Cien Años que afectó la economía del monasterio. En
el siglo XVI, su administración pasaba por épocas bajas y se
encontraba en decadencia, situación que se agravó con las guerras de
Religión, en 1568 la villa de Charroux y la propia abadía fueron
víctimas de un asalto y saqueo, dejando el lugar en ruinas. |
Carlomagno, representado en
una moneda |
