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Monasterios |
| Los esenios. La comunidad de Qumrán |
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Según los estudios arqueológicos del lugar y de la documentación escrita encuentrada in situ se trataría de una comunidad dedicada específicamente a la observancia estricta de la Ley (Torá), los miembros de la comunidad tenían que cumplir unas condiciones muy severas para su aceptación y una vez integrados en el grupo, mantener esa observancia de la Ley y de la Regla y renovar cada año los votos de ingreso. También tenían importancia las comidas rituales comunitarias y la celebración de las fiestas religiosas. Mantenían una especial vigilancia en una austeridad muy rigurosa, pobreza, oración y celibato. Cabe destacar la voluntad de abandonar el mundo secular y adentrarse en el desierto para practicar la vida comunitaria y poner en práctica el seguimiento estricto de la ley. |
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La primera ocupación cenobítica del lugar de Qumrán estaría relacionada con el Maestro de Justicia, un religioso que habría encabezado una escisión dentro del movimiento esenio y de la que hay teorías diversas sobre su figura e incluso cronología, se le considera autor de varios textos encontrados en el asentamiento monástico. Este monasterio se fundaría hacia el 150 aC en un lugar habitado en la antigüedad, pero que en ese momento llevaba siglos abandonado. Hacia el 135 aC el lugar pasó por una profunda transformación con nuevas construcciones y renovación de las existentes, especialmente un acueducto que les había de suministrar el agua necesaria. El 31 aC el lugar sufrió los efectos de un terremoto y quedó abandonado temporalmente, en el 68 dC se extinguió definitivamente a causa de la ocupación romana. |
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Se ha especulado con la posibilidad de que san Juan Bautista (e incluso el mismo Jesús) estuviera relacionado con los esenios, al menos en una etapa inicial de su estancia en el desierto. También se ha querido ver que las primeras comunidades cristianas de Jerusalén tuvieran algunos rasgos inspirados con los esenios. A pesar de tratarse de un establecimiento monástico netamente judío, posiblemente el monacato cristiano que se desarrollaría más adelante y empezaría a expandirse desde Egipto, habría adoptado algunos elementos de la organización cenobítica esenia. También cabe mencionar la proliferación de literatura de fabulación esotérica alertando del peligro que supondría para las religiones establecidas la difusión de algunos textos encontrados. |
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| Baldiri B. - Marzo de 2016 / Actualizado diciembre de 2016 |
