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						Hacia el 
						año 700, el noble Adroaldus y su esposa fundaron en ese 
						lugar un monasterio femenino al frente del cual pusieron 
						su hija Siechedis. Esta casa recibió el apoyo espiritual 
						de san Silvino de Toulouse, el cual, a su muerte en 717 
						o 718 fue enterrado en la iglesia del monasterio. Aquel 
						primer monasterio desapareció como tal en el año 871 a 
						causa de las invasiones normandas. Las reliquias del 
						santo fueron trasladadas y el 950 se depositaron en la
						abadía de Saint-Bertin 
						(Saint-Omer). En 1072, el conde de Hesdin restauró 
						la vida monástica con la colaboración de la abadía de 
						Saint-Bertin, y se estableció una comunidad masculina, 
						que se mantendría en este lugar hasta la Revolución. |  | 
					
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			Tras unos primeros siglos de prosperidad, en la 
			segunda mitad del siglo XIV comenzó a sufrir de las inestabilidades 
			políticas del territorio desde la guerra de los Cien Años y aún más 
			adelante, hasta las restauraciones de los siglos XVII y XVIII. Fue 
			suprimida en 1791, en adelante tomó las funciones parroquiales ya 
			que con la Revolución también se perdió la iglesia parroquial de 
			Auchy, dedicada a Saint-Georges.
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             Interior de la iglesia de la abadía de Auchy
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