Convento de Sant Josep de Girona

La provisionalidad perduró hasta que se terminaron las obras del nuevo convento, comenzado en 1620 y terminado en 1631, cuando se consagró la iglesia. La casa sufrió los efectos del asedio de 1694, cuando unas bombas estropearon el tejado de la iglesia. Durante la guerra de la Independencia quedó muy afectado, en el Trienio Liberal volvió a quedar temporalmente sin comunidad, pasó a manos privadas, pero todavía pudo recuperarse. La comunidad tuvo que abandonar definitivamente este establecimiento en 1835. El edificio tuvo otros usos, evitando la destrucción, en 1843 fue ocupado por oficinas de la administración, en 1861 pasó a Hacienda, se eliminó la escalinata que subía hasta en la iglesia, elevada respecto a la plaza y se abrió un balcón donde antes estaba la puerta de entrada del templo. Hacienda abandonó el lugar en 1961 y actualmente el convento de los Josepets es la sede del Arxiu Històric de Girona.