Los
dominicos se establecieron en Valladolid en 1276 gracias
al apoyo de la reina Violante de Aragón, esposa de
Alfonso X el Sabio. Fue su sucesora, María de Molina,
quien tomó el relevo en el patronazgo de esta casa y se
encargó de la construcción de su iglesia. Juan II, en el
siglo XV, estableció el palacio junto a esta casa de los
dominicos. Juan de Torquemada (tío del inquisidor Tomás
de Torquemada) renovó totalmente la iglesia. Simón de
Colonia trabajó en la fachada hasta el 1500 pero la obra
aún continuaba en la época del Duque de Lerma que
también hizo su contribución a la obra. |