|
San Acardo (Achard,
Aichar) de Poitiers |
Natural de Poitiers, el noble
Acardo se formó en la abadía de
Saint-Hilaire de Poitiers para ingresar
luego al
monasterio de Saint-Jouin-de-Marnes (o
Ension, Deux-Sèvres), donde se hizo
monje. Hacia 670-672 fundó, con el apoyo
económico de su familia y la ayuda del abad
y fundador de la abadía de Jumièges,
san
Filiberto, el
monasterio de Quinçay (Saint-Benoît de
Quinçay), cerca de Poitiers. A raíz de
la estrecha relación entre Quinçay y
Jumièges, el 682 fue elegido abad de
Jumièges, donde se desplazó tras recibir la
bendición de san Ouen, obispo de Rouen.
Murió en esta abadía el 687, donde fue
enterrado y venerado como santo a causa de
los numerosos milagros que se le atribuían,
después sus reliquias se dispersarían por
diversos lugares.
|
Ruinas del
monasterio de Jumièges
|
|
Relacionado con: |
|
Iglesia del monasterio de Saint-Benoît de Quinçay |
|
Fachada de la iglesia de
Saint-Jouin |
|
|
Bibliografía:
-
CROISET, Jean (1723). Les vies des saints pour tous les
jours de l’année. Lyon: A. Boudet
- LECOINTRE, Eugène (1851). Notice sur l'abbaye de
Saint-Benoît de Quinçay. Mémoires de la Société des
Antiquaires de l'Ouest. Poitiers / Paris: Derache
- MARQUIS DE FORTIA, M. (1830). Vie de Saint Achard, abbé de
Jumièges. París: H. Fournier |
|
Baldiri B. -
Octubre de 2013 |
|