El monasterio de la Immaculada, ahora en las afueras de la ciudad de Valls, fue fundado a partir de 1680 cuando llegaron desde el monasterio de Jesús Maria de Barcelona cuatro monjas bajo la dirección de Basilisa de Pereire, que se encargaron de las gestiones para llevar adelante la empresa. En 1684 comenzaron las obras para construir los espacios conventuales junto al castillo, una construcción que se habría levantado durante la segunda mitad del siglo XII, ampliada posteriormente y de la que no hay restos aparentes.
En 1683 murió la fundadora, que fue enterrada en el mismo monasterio, en 1761 se inauguró la nueva iglesia. Entre los años 1808 y 1811 durante la guerra de la Independencia las monjas se vieron obligadas a cambiar sus costumbres y abrieron una escuela. En 1835 las dependencias se convirtieron en un cuartel y más adelante pasaron a estar ocupadas por el Hospital de Sant Roc Roque, que más tarde se trasladarís al convento de Capuchinos. En 1846 volvió a tener comunidad que se mantuvo hasta que en 1936 las monjas tuvieron que huir mientras el monasterio era derribado. El 1860 profesó Filomena Ferrer Galceràn (Filomena de Santa Coloma) que en 1894 impulsó la fundación del monasterio de Mora d'Ebre (Ribera d'Ebre) su ciudad natal. Después de la guerra, se reconstruyó la comunidad y el monasterio hasta que finalmente el lugar se vendió y en 1952 se trasladaron fuera de la ciudad, en el camino de la Verneda.
- CATALÀ ROCA, Pere (1992). Castell de l’Arquebisbe i esment del castell d’Espinavessa. Els castells catalans. Vol. III. Barcelona: Rafael Dalmau Ed.
- GAVÍN, Josep M. (1980). Inventari d'esglésies. Vol. 6. Barcelona: Artestudi
- PUIGJANER Y GUAL, Francisco (1881). Historia de la Villa de Valls desde su fundación hasta nuestros días. Valls: Imp. Francisco Pellisser