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La fundación de esta casa se llevó a cabo gracias a la
iniciativa del conde de la Marca (Lemosín), Bosón II
(988-1008), quien dio una iglesia de su propiedad a la
comunidad benedictina de
Saint-Pierre de Uzerche (Corrèze) con el fin de
establecer la nueva abadía, que pasó a depender de ella
aunque más adelante (ya en el siglo XIII) se desvinculó
de la casa fundadora. La abadía sufrió los efectos de
las guerras que afectaron el territorio en el último
cuarto del siglo XV y un siglo después, en 1591, fue
cuando quedó prácticamente destruida debido a su
ocupación en el marco de las guerras de Religión. Los
efectos de esa destrucción no se superaron nunca, los
monjes pasaron a vivir en casas de la población mientras
que cerraban y dejaban sin uso buena parte de la
iglesia. En 1610 pasaban a formar parte de la orden o
congregación de Cluny y retornaba la vida comunitaria,
aunque con las dependencias monásticas en pésimas
condiciones y fue con el paso de los años que se fueron
rehaciendo aquellos espacios. A finales de ese siglo se
instaló uns nueva sillería del coro, que todavía se
conserva. Sin embargo, el monasterio se mantuvo hasta
finales del siglo XVIII, cuando fue clausurado a causa
de la Revolución . |
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