San Clemente de Metz
Según la
tradición, Clemente sería de origen romano, convertido al
cristianismo por san Pedro, fue enviado por éste a evangelizar la
Galia. Se estableció en un eremitorio donde lo fueron a buscar los
habitantes de Metz para que les ayudara a librarse de Graoully, un
dragón que vivía en el anfiteatro. Clemente amansó a la fiera y la
llevó al río Seille junto con otras serpientes terribles. También
fundó varias iglesias en la ciudad. Más allá de la leyenda, todo
hace pensar que realmente habría vivido durante los siglos III-IV,
que era de origen romano y que habría levantado una capilla dentro
del recinto del antiguo anfiteatro romano en ruinas, edificio que la
arqueología dice que fue destruido alrededor del 300 y donde se
confirma la existencia de una capilla. A su muerte se enterró en un
cementerio cercano y en 1090 el obispo Heriman trasladó sus restos a
la catedral. |
San Clemente de Metz con el
dragón Graoully
Ilustración de Speculum historiale (1396)
Bibliothèque nationale de France |
San Clemente de Metz
Vidriera moderna de la iglesia de Saint-Étienne de Gorze |