El origen
de esta abadía se explica en el relato hagiográfico de
su fundadora, santa Glosinda, a pesar de su base
histórica, contiene detalles que hay que considerar como
legendarios. Glosinda habría nacido hacia el 578, era
sobrina de Pipino de Heristal, mayordomo de palacio del
reino de Austrasia que tenía su capital en Metz. A pesar
de la oposición de sus padres a su vocación religiosa,
gracias a la ayuda de su tía Rotlinda, monja en Tréveris,
y a un episodio milagroso, Gloslinda pudo profesar en el
monasterio de Rotlinda y más adelante, hacia el año 600,
fundó en unos terrenos familiares el monasterio de Metz
que más adelante llevaría su nombre. Glosinda fue la
primera abadesa de la casa, hasta el 610, fecha de su
muerte, fue venerada como santa en una capilla levantada
junto al monasterio. |
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La iglesia del
monasterio estaba dedicada a la Virgen y a san Sulpicio (obispo de
Bourges entre el 624 y 647) después iría tomando forma la nueva
advocación de Sainte-Glossinde. La abadía pasó a manos de la reina
Teutberga, repudiada por Lotario II (c870) que algunas fuentes la
consideran abadesa de este monasterio. En el siglo X se encontraba
en decadencia, la mala gestión había hecho perder buena parte de sus
posesiones aparte de sufrir un grave relajamiento de las costumbres.
Hacia el 945, el obispo Adalberón (929-954) se encargó de reconducir
la situación de algunos monasterios que sufrían la misma situación,
en esta casa puso a su frente a su sobrina Himiltrude que trabajó
para la reforma dentro de la clausura. El obispo también trabajó
para recuperar el patrimonio que se había perdido, llevó a cabo
obras de reconstrucción del monasterio y dignificó el sepulcro de
santa Glosinda.
En el siglo XVII
volvía a pasar una época de relajamiento de las costumbres que
provocó una serie de incidentes entre la comunidad y las autoridades
de la Iglesia, incluso intervino el papa Alejandro VII. No fue hasta
el siglo XVIII que se realizó la reforma, volviendo a la regularidad
y restaurando el patrimonio, lo que permitió llevar a cabo
importantes obras de construcción. La iglesia que aún se conserva
fue levantada en esta época, entre los años 1752 y 1757. La
Revolución suprimió el monasterio (1790-1792), las dependencias
monásticas se adaptaron el 1802 como sede del obispado de Metz. |
Escudu de Sainte-Glossinde
Según el Armorial général de France, s XVIII
Bibliothèque nationale de France |
Pipino de Heristal y Plectruda,
tíos de santa Glosinda
Detalle de la Genealogia dels reis de França de Bernard Gui
(1301-1325)
Bibliothèque nationale de France |
La abadía de Sainte-Glossinde
(núm. 12) representada en un plano de Metz (1638)
Bibliothèque nationale de France |