Vinculada
a la abadía de Sainte-Croix de
Poitiers y alrededor de su iglesia funeraria de
Sainte-Radegonde, donde se veneran los restos de la
fundadora (santa
Radegunda), se reunió una comunidad de clérigos que
debían servir las necesidades cultuales de las monjas.
La iglesia estaba dedicada inicialmente a Notre Dame,
por su carácter mortuorio y siguiendo las costumbres fue
construida fuera del recinto amurallado de la ciudad.
Aquellos clérigos vivían en comunidad y dependían
plenamente de la abadesa del monasterio de Sainte-Croix.
Se tienen noticias de aquella comunidad desde finales
del siglo VI, con el calificativo de monjes y bajo la
dirección de un abad, lo que tampoco permite asegurar
que se trate de un monasterio ni tampoco si se seguía
alguna regla monástica o, en su caso, cuál era. |
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La iglesia
primitiva se habría visto afectada por las invasiones normandas, se
restauró o reedificó i se consagró en el año 863, pero fue
incendiada nuevamente el 955 y a finales del siglo X se encontraba
en ruinas. El 1012 se reconstruyó la cripta y restauró la tumba de
santa Radegunda. Se tiene noticia de que, a ruegos de Inés de
Aquitania (c1025 -1077), el papa Alejandro II emitió una bula (1072)
reformando aquella comunidad que se había relajado en cuanto a sus
costumbres y se había aprovechado de los bienes de la casa. En
adelante tendría la consideración oficial de canónica, estaría
dirigida por un prior que debería someterse a la obediencia de la
abadesa de Sainte-Croix. Esta sumisión (de una comunidad masculina a
una femenina) traería muchos desacuerdos entre las dos
instituciones. Los canónigos de Sainte-Radegonde no tendrían la
consideración de "regulares", posiblemente serían seguidores de la
regla aquisgranense (establecida en 817) y nunca siguieron la Regla
de San Agustín. |
Sainte-Radegonde |