El origen
de esta canónica está vinculado al personaje de san Lupo
obispo de Troyes, nacido a finales del siglo IV y que la
tradición lo pone en contacto con otros personajes de la
época, tal como san Germán de Auxerre. Se le hace
fundador de una capilla dedicada a la Virgen en la
ciudad de Troyes. A su muerte, el 479, Lupo fue
enterrado en aquella capilla, donde más adelante se
estableció una comunidad monástica que algunos hacen
retroceder hasta la época en la que Lupo aún vivía,
incluso que era fundación suya. El 889 Troyes fue
saqueado por los normandos, lo que obligó a la comunidad
a abandonar el monasterio llevándose las reliquias y
refugiarse en la ciudad. El resultado fue la destrucción
de la casa monástica situada extramuros y su
reconstrucción en el interior, junto a la catedral donde
la comunidad continuó su existencia, y que sería
conocida como abadía de Saint-Loup. |
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Aquella
iglesia que conservaba el sepulcro de san Lupo estaba situada en un
lugar apartado del centro de la ciudad. Más adelante se estableció
allí una comunidad monástica que algunos hacen retroceder hasta la
época en la que Lupo aún vivía y era obispo de la ciudad, incluso
que era fundación suya. La primera noticia que se dispone de esta
abadía hace referencia al abad Winebaudus que hay que situar en el
primer cuarto del siglo VII, por lo que se supone que la casa
estaría ya en pleno funcionamiento en aquella época, pero que no
confirma su existencia en el siglo V. Se sabe también que a mediados
del siglo IX, Carlos el Calvo dotó a la abadía con varias
posesiones. El 889 Troyes fue saqueado por los normandos, lo que
obligó a la comunidad a abandonar el monasterio llevándose las
reliquias y refugiarse en la ciudad. El resultado fue la destrucción
de la casa monástica extramuros y su reconstrucción en el interior,
junto a la catedral. |
Planta de Saint-Martin-ès-Aires
Ilustración publicada en la Histoire de l’abbaye de Saint-Martin-ès-Aires (1875) |