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Documentada desde el 1040, esta abadía se levantó en el
lugar de una capilla construida sobre el sepulcro del santo
mártir titular. En 1082 pasó a depender de la
abadía de Moissac (Tarn y
Garona). En aquella época se debió levantar la
iglesia actual, que lleva una inscripción con la fecha
de su consagración: el 1097. Esta casa consiguió mucha
vitalidad durante los siglos siguientes pero debido a
las guerras de Religión fue saqueada, más adelante se
pudo rehacer gracia a la llagada de la congregación de
Saint-Maur, subsistió hasta la Revolución. Finalmente
el lugar fue vendido en 1796, lo que significó la
destrucción de buena parte de sus edificios. Actualmente
queda en pie una parte de la iglesia, con capiteles
historiados y restos menores de las otras dependencias
conventuales. |
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