Se trata de un monasterio femenino fundado a instancias
de Eustaquia de Corbeil alrededor del 1130 en unos
terrenos que poseía junto al río Yerres. La fundadora
consiguió el apoyo del obispo de París Étienne de Senlis
(1123-1142) que puso la casa bajo la Regla de San Benito
e hizo venir la primera abadesa del
monasterio de
Val-Profond (Essonne). Gracias al apoyo y las
donaciones que la beneficiaron, pronto se convirtió en
una casa poderosa e incluso la comunidad del
monasterio de
Saint-Remi de Senlis (Oise) se puso bajo la
dependencia de éste. Dentro del recinto monástico, la
comunidad disponía de un priorato con monjes que
cuidaban de atender las religiosas, estaba dedicado a
Saint-Nicolas. Hacia el 1150 murió Eustaquia, que años
antes, ya viuda, se había recluido en el monasterio. En
1157 una bula del papa Adriano IV y una segunda de su
sucesor, Alejandro III (del 1181) confirmaban las
posesiones del monasterio. En esta época la comunidad
del monasterio de
Le Val de Gif (Essonne) se refugió temporalmente en
Yerres mientras se restauraba su casa. |
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Gracias a la buena situación económica, durante el último cuarto del
siglo XIII se reconstruyó el monasterio unificándose con el priorato
de Saint-Nicolas, que dejó de existir. La época de bonanza terminó
con la guerra de los Cien Años, a mediados del siglo XIV Yerres
sufría dificultades económicas a causa de la inestabilidad general
que se prolongó durante decenios hasta que en 1450 se quedó
temporalmente sin comunidad. Durante la primera mitad del siglo XVI
la situación de la casa permitió que se llevaran a cabo importantes
obras de restauración de las construcciones y dependencias
monásticas. El monasterio mantuvo la actividad hasta la Revolución,
en 1792 las monjas lo tuvieron que abandonar y en 1793 ya se había
vendido, con la pérdida o dispersión de su patrimonio mobiliario. El
lugar se utilizó para actividades industriales y ahora está ocupado
por oficinas y viviendas. |
El monasterio de Yerres |