Abadía de Sainte-Marie de Villelongue

Después del primer asentamiento en Compagnes se encuentran una serie de donaciones a favor de la comunidad, bajo la dirección del abad de Bonnefont y Compagnes, no se menciona como abad de Villelongue hasta 1151, cuando la construcción de un nuevo monasterio en el lugar actual ya debía de estar avanzada. En 1162 los monjes de Villelongue intervinieron en la fundación de la abadía cisterciense femenina de Rieunette, en adelante este establecimiento fue dirigido con mayor o menor intensidad desde la abadía madre. Ya en 1164 recibieron la donación de la iglesia de Sainte-Marie de la Garriga (en Rivesaltes, Rosellón), donde se estableció una granja o priorato, activo durante los siglos siguientes, hasta que en 1593 pasó a depender de San Martín del Canigó.

En 1916 el lugar fue declarado monumento histórico, y protegido, después de pasar por varias manos, en 1963 fue adquirido por un nuevo propietario y se realizaron trabajos de restauración. Se conserva la cabecera de la iglesia del siglo XIII, el primer tramo de la nave, el transepto y la zona absidal, formada por un gran ábside central y dos absidiolos abiertos en cada brazo del crucero. Son de planta rectangular. Una escalera lleva desde el brazo sur del transepto al dormitorio, debajo del cual se encuentran la sacristía, la sala capitular y otras dependencias. En el sur se encuentra el claustro del que sólo se conserva una galería, con capiteles decorados. Al sur del claustro se encuentra el refectorio, una bella sala gótica de tres tramos.