Monasterio de San Zoilo de Carrión

En ese momento era conocido como San Juan de la Puente, advocación que todavía estaba vigente en 1051, pero tras una incursión militar en Córdoba en la que participó Fernando Díaz († 1083), miembro de la familia condal, éste regresó con las reliquias del mártir san Zoilo, que fueron depositadas en el monasterio de San Juan, lo que motivó el cambio de advocación. San Zoilo de Córdoba fue un mártir, la tradición dice que murió en una persecución contra los cristianos en el año 304 y fue enterrado en esa ciudad. Mucho tiempo después (en el año 613), y de forma milagrosa se localizó su tumba, se levantó una basílica, y sus restos fueron objeto de veneración hasta su traslado a Carrión.

La fase expansiva se prolongó hasta mediados del siglo XIII, cuando sus posesiones ya eran considerables, entre las cuales se encontraban algunas casas monásticas, de mayor o menor importancia. En el siglo XIV, se detecta una época de decadencia, con muchos problemas de carácter económico, al tiempo que se registraban también incidencias graves en lo que se refiere a la disciplina monástica. En el siglo XV se independizó de Cluny y pasó a depender directamente de Roma. Tuvo abades comendatarios, desligados de la comunidad y poco dispuestos a cuidar el establecimiento monástico, lo que no ayudó a su recuperación. A partir de 1531, sólo mantuvo vínculos con San Benito de Valladolid, entrando a formar parte de su congregación, la situación se resuperó, se independizó y pudo elegir abades propios.

Esta situación se mantuvo, con condiciones y variantes diversas, hasta 1959, cuando pasó a manos del obispado. En 1990, la mayor parte de los edificios fueron vendidos y actualmente se encuentra adaptado como explotación hotelera. En 1993, durante las obras de restauración del edificio, se descubrió la portada románica de la iglesia. De época medieval, prácticamente sólo se conserva aquella portada, que podría situarse entre los siglos XI y XII. La iglesia es barroca de una única nave, con una fachada de la misma época (s. XVII). En su interior se conserva una serie de sepulcros, los más antiguos y sencillos son de época condal (s. XII) y los más recientes del siglo XIII. El retablo procede de otra iglesia. El claustro es un ejemplar notable de finales del siglo XVI.