Hacia el 980 se fundó en este lugar un priorato
cluniacense gracias la donación de unas tierras
efectuada a favor de la
abadía de Cluny. Se considera al
abad
Odilón de Cluny (994-1049) el gran impulsor de esta
casa. Por otro lado, al este de aquí (ahora al término
de Fareins, Ain) había un monasterio femenino también
cluniacense que estaba situado en una isla del Saona.
Debido a la inestabilidad de aquel lugar por la acción
del río, las monjas se encontraban a finales del siglo
XIII en una situación delicada ya que el monasterio
había quedado afectado por las aguas y tuvieron que
abandonarlo. Con la autorización de Cluny se trasladaron
a Salles que en adelante se convertiría en un monasterio
femenino. A finales del siglo XVIII las monjas de esta
comunidad, que tenían un régimen de vida muy relajado,
se habían convertido en canonesas. |
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