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Abadía de Saint-Géraud
de Aurillac Abbaye Saint-Géraud d'Aurillac |
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Alrededor del año 967 el conde Borrell II de Barcelona pasó por Aurillac donde veneró las reliquias del santo y regresó con el monje Gerberto de Aurillac, quien estudió en algunos monasterios catalanes y en Vic y después de estar en diversos lugares de Europa, el 990 fue elegido papa con el nombre de Silvestre II. En esta época el monasterio de Aurillac había convertido en un centro religioso y de poder de primer orden, a la vez que había intervenido en la fundación de otros monasterios como Saint Pons de Thomières (Hérault), Chanteuges (Alto Loira), Saint-Chaffre (Alto Loira), Varen (Tarn y Garona), Souillac (Lot) e incluso Santa María do Cebreiro (Lugo, Galicia). |
El papa Silvestre II |
La iglesia de Saint-Géraud |
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Tenía un importante número de prioratos dependientes y sus posesiones eran muchas y se extendían por todas partes. En esta época se habla de una imagen de oro de san Geraldo, objeto de mucha devoción. El año 1095 el papa Urbano II, de regreso del Concilio de Clermont, consagró nuevamente la iglesia del monasterio, que había sido reformada. El poder de la abadía, que tenía jurisdicción civil y criminal, era muy importante y durante la segunda mitad del siglo XII hizo estallar de forma violenta la oposición de la población de Aurillac y relacionado con aquella situación en 1184 la casa fue asaltada por las tropas y saqueada, lo que se extendió, además, a posesiones alejadas del monasterio. En 1233 todavía se registró una nueva ocupación de Aurillac y de su abadía, lo que provocó la intervención del papa Gregorio IX, excomuniones incluidas. A pesar de la situación de inestabilidad el monasterio mantenía todavía en aquella época su situación de prosperidad. |
La iglesia de Saint-Géraud |
Muros medievales de la iglesia Imagen de Wikimedia Commons |
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A mediados del siglo XIV el monasterio pasó por una época de decadencia a causa de la guerra de los Cien Años que afectó la región, agravada por los episodios de peste. Aquel estado de cosas se agravó en el siglo XV, en 1464 murió el abad Hugues de la Roche, el último elegido libremente por la comunidad, en adelante sería la Santa Sede quien se encargaría de nombrar los abades comendatarios, ante de la situación de desbarajuste que presentaba. Uno de esos abades comendatarios fue César Borgia (entre los años 1493 y 1498). La vida monástica no se regularizó jamás, menudeaban los escándalos de todo tipo e incluso los servidores del abad fueron acusados de un asesinato ocurrido en la población. Finalmente la abadía fue secularizada en 1561. Actualmente quedan pocos testimonios arquitectónicos de aquella abadía benedictina. La iglesia conserva algunos elementos antiguos pero su estructura es el resultado de la restauración del siglo XIX. A su alrededor hay algunos edificios que tienen origen monástico, como el Hospital, una fuente procedente del claustro y la casa de los Canónigos, edificada ya cuando se había secularizado el monasterio. |
Fuente medieval procedente del claustro |
Fachada del hospital del monasterio |
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Capiteles de la fachada del hospital |
Capiteles de la fachada del hospital |
Capitel de la fachada del hospital |
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Casa de los canónigos |
Aurillac |
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Bibliografía: - JOUBERT, Edouard. L’abbaye bénédictine de Saint-Géraud d’Aurillac (894-1561). Aurillac: Imp. Moderne, 1981 - ODÓ DE CLUNY. La Vie de S. Géraud, comte d'Aurillac. Aurillac: L. Viallanes, 1715 |
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Baldiri B. - Marzo de 2013 |