Monasterio de Santa María de Palazuelos

El mismo año, Diego Martínez entregó San Andrés al monasterio de Santa María de Valbuena (Valladolid), que instauró una casa como dependencia de aquella hasta que, en 1175, Alfonso VIII ratificaba sus posesiones ya como abadía cisterciense independiente. En 1213, el propio Alfonso VIII dio la villa de Palazuelos a Alfonso Téllez de Meneses, y el mismo año, este último traspasó la propiedad a los cistercienses de Valbení, con la condición de que la comunidad se trasladara allí, hecho que se realizó después de la construcción de la nueva abadía, al menos sus espacios imprescindibles. En 1218, ya se mencionan los monjes de Palazuelos, en lugar de San Andrés.

En el siglo XIV pasaba por una época de crisis, con el paso del tiempo, fue perdiendo sus bienes, además, la adopción del régimen comendatario no ayudó a su recuperación. En el siglo XVI se encontraba en plena decadencia, época en la que se reformó en lo que respecta a la observancia. A mediados del siglo, Palazuelos se convirtió en la sede donde se celebraban los capítulos generales de la Congregación Cisterciense de Castilla y también se estableció un colegio. Todo ello quedó interrumpido en el siglo XIX, primero sufrió una ocupación militar francesa, que afectó al monasterio, pero en 1835, llegó la exclaustración definitiva y en 1841 se procedió a su subasta.