Abadía de Sainte-Marie de Lagrasse
Abbaye Sainte-Marie de Lagrasse / La Grassa / Santa Maria d'Orbieu / Crassa / Grasse / Orbione
(Lagrasse, Aude)
La fundación de este importante monasterio benedictino habría que situarla poco antes del 779, fecha que se ha podido establecer al diploma de Carlomagno dirigido a su abad, Nimfrido, un personaje influyente, del entorno de Benito de Aniano, reformador del monacato. En 814, Luis el Piadoso confirmó un privilegio de inmunidad otorgado anteriormente por su padre, Carlomagno.
El centro tuvo un desarrollo muy importante, la posición de prosperidad fue consecuencia del apoyo recibido del poder, en particular de los condes de Barcelona. En este sentido, se considera que el conde Sunyer se retiró a la Grasa en 947, de donde fue abad y donde murió, hacia 953. En esta época, seguramente la abadía dependía directamente de la Santa Sede y no estaba sometida al poder episcopal. Dependían de Lagrasse otros establecimientos monásticos, situados a uno y otro lado del Pirineo: Sant Pau de Fontclara (908), Santa Maria de Ridaura (937), Sant Pere del Burgal (950), Saint-Polycarpe de Rasés (1080), Sant Sepulcre de Palera (1107), Sant Andreu de Sureda (1109), San Martín del Canigó (1114), Sant Pere de Galligants (1117).
La situación cambió en torno al año 1080, cuando el monasterio pasó a depender de San Víctor de Marsella, hacia 1104 recuperó la independencia. En esa época el abad de Lagrasse era Berenguer de Narbona, hermanastro de Ramon Berenguer III, conde de Barcelona, que inauguró una nueva época de prosperidad. Por otro lado, la situación condujo a un relajamiento de la vida monástica, de modo que en el siglo XIII se necesitaron algunas reformas de las normas internas con el fin de reconducir su actividad espiritual. Hasta el siglo XV, la casa pasó por un período de decadencia ocasionada por una deficiente administración y la situación social de la época, en el siglo XVI tenía abades comendatarios.
Debido a esta situación, en 1662 la congregación de Saint-Maur se hizo cargo de la abadía, que la impulsó y mantuvo hasta su extinción, a causa de la Revolución (1792). En 1894 una institución religiosa femenina se hizo cargo del lugar y se instauró un centro asistencial. Actualmente los edificios de la antigua abadía están divididos en dos partes, una pública y otra ocupada por una comunidad monástica, los Chanoines Réguliers de la Mère de Dieu. El conjunto monástico está precedido por un amplio patio neoclásico, edificado a mediados del siglo XVIII, desde aquí se puede acceder al claustro de la misma época, sucesor de una construcción anterior.
La iglesia actual es la que se levantó entre 1274 y 1309, sobre un edificio de época carolingia, se conserva una parte del transepto sur, que presenta tres magníficos ábsides del siglo XI. Esta parte comunica con el campanario inacabado, una construcción de grandes proporciones en relación al resto de edificios, es de la época del abad Philippe de Lévis (1500-1537). Por otra parte, en la parte del monasterio de propiedad pública se conserva la casa del Abad, con un hermoso patio con dos galerías abiertas, una torre prerrománica, la bodega de grandes dimensiones y otras dependencias menores. En el piso superior cabe destacar el dormitorio, la capilla de Saint-Barthélémy, de 1296, de la misma época que la casa del Abad. Esta capilla conserva todavía su decoración mural, relativamente bien conservada, así como su pavimento de cerámica.
Monasticon Gallicanum
Bibliothèque nationale de France
Fragmentos escultóricos del círculo del Maestro de Cabestany
En una de las diversas modificaciones de la iglesia de Lagrasse, se incorporó una portada románica decorada. Se conservan varios elementos que quizás estén relacionados con ella y dan testimonio de su riqueza. Esta obra ha sido atribuida al Maestro de Cabestany, a quien también se pueden atribuir otras obras en los monasterios cercanos de Saint-Hilaire y Saint-Papoul. En la misma abadía se conservan varios fragmentos, otros se encuentran en el cementerio del pueblo, junto al monasterio, se trata de dovelas de mármol decoradas procedentes de ese portal. Estas piezas llevan inscripciones, pero debido a su estado fragmentario son indescifrables. Sí es posible leer los nombres de "(wi)llelmus y robertus", que coinciden con los de dos abades que gobernaron Lagrasse, el primero entre 1157 y 1161 y el segundo entre 1161 y 1167. Hay otros elementos posiblemente procedentes del portal, como un mármol con una cabeza de buey con una mano humana que lo agarra.
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